Ámbito Familiar
-Recuerde permanentemente que su tranquilidad y la de su familia dependen de lo que usted y sus familiares digan, por eso eviten comentar o contar a extraños sus planes familiares.
-Maneje un entorno de confianza que le permita conocer el paradero y actividades de su familia en todo momento.
-Estimule la preocupación mutua por los aspectos de seguridad, para que los miembros de la familia participen en este esfuerzo.
-Insista a su familia sobre la importancia que requiere el observar y mejorar las medidas de seguridad, en especial, el grado de confiabilidad de las personas que lo rodean a usted y a su familia.
-Establezca un “código” personal de comunicación intrafamiliar que les permita tratar asuntos privados a través de líneas telefónicas o en lugares públicos, de tal manera que dificulte que terceras personas entiendan de qué se trata.
-Mantenga la reserva sobre sus desplazamientos e itinerarios. Advierta a su familia de la necesidad de abstenerse de dar información privado, direcciones, números telefónicos, cuentas de correo electrónico, horarios, sitios que frecuenta y viajes.
-Nunca permita el acceso a su residencia a personas extrañas, encuestadores, funcionarios de empresas de servicios públicos u organismos de seguridad, sin antes establecer su plena identidad.
-Mantenga en buen estado de funcionamientos los sistemas de alarmas, citófono, circuito cerrado de televisión, botones de pánico, detectores de movimiento y demás dispositivos electrónicos de seguridad de su hogar y lugares habituales de descanso.
-En puntos estratégicos de la residencia debe haber excelente iluminación. Tenga cuidado con los arbustos, cercos vivos y/o plantas descuidadas por crecimiento, ya que impiden la visibilidad y pueden servir de refugio para los delincuentes.